BELGRANO, EL HOMBRE DEL BICENTENARIO

POR FELIPE PIGNA




“…Este  joven  miembro  de  una de las familias más acomodadas de Buenos Aires,  bien  pudo  haber utilizado su  título de abogado  obtenido en España para tener un buen pasar en Europa , pero  decidió ponerse  a disposición  del cambio  de  las  injustas  condiciones  de  vida,  de  la  modernización de la economía , del impulso  de las nuevas ideas en la industria en su tierra, que por entonces estaba lejos de constituirse en nación . Lo hizo en medio de un régimen colonial que iba en sentido inverso a sus intenciones.
En el Consulado se ocupó  de los temas que deberían ocupar  a un verdadero estadista: la agricultura, la ganadería, la situación de los campesinos, las vías de comunicación, las razas ovinas y bovinas más convenientes para nuestro campo, la introducción de nuevos cultivos, el fomento de la industria y sobre todo de la educación, a la que entendía como necesariamente gratuita  y obligatoria en igualdad de condiciones para niños y niñas, hombres y mujeres.

Su lucha fue no solo la evidente en sus grandes victorias y derrotas en el campo de batalla, sino la cotidiana  contra la incomprensión y la enemistad que siempre le prodigaron los poderosos, los “partidarios de sí mismos” como él los definió magníficamente.


Fue pionero de nuestro periodismo. Comprendiendo la función didáctica y transformadora de la prensa, participó activamente en el Telégrafo Mercantil, el Semanario de Agricultura, Industria y Comercio y El Correo de Comercio.

Tuvo un rol protagónico en las acciones político-militares que conducirán a la Revolución de Mayo.
Como vocal del Primer Gobierno Patrio apoyará las ideas innovadoras de Mariano Moreno, pero deberá marchar hacia su primera “Misión Imposible”  al Paraguay.
Seguirán su instalación de las baterías “Libertad” e “Independencia” en las costas del Paraná y la creación de la Escarapela y la Bandera; su durísima “Campaña  en el Norte”, el glorioso “Éxodo Jujeño”  y las victorias de Tucumán y Salta, como también las derrotas de Vilcapugio y Ayohuma”.

Planteó, contra la opinión de “los doctores de Buenos Aires” el proyecto de una monarquía constitucional  al frente de la cual se imaginaba a un inca.

“…Por todo esto, pienso que Belgrano debería ser considerado el HOMBRE DEL BICENTENARIO.





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